martes, 30 de agosto de 2011

Vaya peña de chalados que hay por Granada.

Hoy en el curro me ha ocurrido algo poco usual.

Vino un tio que hace tiempo lo vi para echar un CV. De él recuerdo que me dejó una impresión rara de cojones, de estar un poco tocado del ala, ya me entendeis.

Se le dió en aquel momento una solicitud de trabajo para que rellenara un documento en el que ponga su nombre, sus trabajos, estudios y esas cosas, vamos algo que se hace en poco más de 4 minutos.
Bueno, pues este tio tardó sin exagerar más de 3 minutos en poner su nombre, si si, como leeis, SOLO SU NOMBRE más de tres minutos, ¿Qué pasa?, ¿Es un espia y no sabe que pasaporte usar o que?. El tio sólo hacia mirar a la pared, a poner gestos raros...

Me dejó una impresión de...chaval no se donde vas a encontrar trabajo, y eso que tienes los cojones negros, ya más de 40 años. En fin, lo mismo tiene algun deficiencia psíquica o mental.

Bueno, pues hoy estoy hablando con una trabajadora en la entrada de la empresa y entra el tio, al minuto sale y me dice: Oye tu me atendiste la última vez,¿no?. A lo que respondí, Si, me suena su cara.

Ahí comenzó un suplicio de más de 20 minutos el tio hablando de polleces de otras empresas, de su comunidad de propietarios, que si un vecino tenia varios coches y gilipolleces por el estilo que ni me van ni me vienen, sencillamente si dejas de nuevo el CV pues lo tienes actualizado y lo mismo se te llama, pero deja de molestar que los demás tenemos trabajo que hacer, imbécil.

Le costaba sacar las palabras y casi que tenía que ir yo acabando sus frases. Lo más gracioso viene cuando otro compañero al verme apurado y era hora de irme me dice: Oye, Menganico, te llaman por teléfono.
Con el fin de salvarme de la situación hicieron el paripé, pero el tio dale que te dale, le dije bueno pues ya le llamaremos y dice: Es que he cambiado de teléfono. Entonces le dije, bueno pues pase y déjemelo.
Me ve el compañero entrar con el  y voy a por una hoja de papel y un boligrafo y me dicen: Es que no nos quiere dar el teléfono a nosotros. A lo que le digo al tio: Entonces que es lo que quiere. El tio con una gilipollitis encima de tres pares de cojones dice: No, es que prefiero darlo a una empresa en la que pueda tener oportunidades, me gusta el cara a cara, no el teléfono, eso no me gusta...

Vamos un puto chalado de cojones, pues ale chaval, puerta, le despedí amistosamente y vete a calentarle el tarro a tu puta madre. Vaya panda de gentuza que hay en esta ciudad, madre mia, nos estuvimos riendo un rato en la oficina. ¿Quieres currar y ni dejas CV, ni teléfono ni nada?, vaya flipado.

En fin, que en esta ciudad de los cojones hay un puñado de chalados, madre mia, ahi sueltos. Y encima me dijo el tio que trabajó en la hosteleria. ¿Cómo puede ser que un chalado de estos trabajando en la hosteleria y mucha gente competente en el paro?, es increible que ocurran estas cosas.

Vaya pais.

No hay comentarios:

Publicar un comentario